El proyecto Metro-TUS es una agresión a la clase obrera

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A partir del 1 de febrero se ha implantado en Santander una reforma del sistema de transporte público urbano conocido como Metro-TUS. Este proyecto que fue presentado como un plan de modernización de la ciudad para adaptarla a los nuevos tiempos no es más que otra estafa efectuada por el Ayuntamiento de Santander gobernado por los partidos burgueses PP y Cs.

Los cambios efectuados en las líneas han dado como resultado que barrios obreros del extrarradio como Peñacastillo, Monte, Cueto o La Albericia carezcan ahora de una línea directa que les una con el centro, de manera que sus habitantes tienen que realizar un transbordo para llegar al núcleo urbano. En algunas líneas que conectan la periferia la diferencia entre recorridos ha aumentado de 20-30 minutos a 40-50. Es más, debido a la reducción de la flota y de la plantilla, estos horarios no suelen cumplirse debido a los retrasos, de manera que es normal que entre bus y bus pueda transcurrir más de una hora. Los obreros que requieren del transporte público son perjudicados al tener que aguantar interminables esperas y al tener que apretarse en los autobuses cual sardinas en lata debido a la reducción de vehículos circulantes. Mientras tanto, los conductores son sancionados injustamente por no poder cumplir con un trayecto irrealizable impuesto por el Ayuntamiento.

Por si fuera poco este fiasco monumental, la implantación del carril bus en la principal vía del centro (ahora retirado debido a la presión vecinal) provocó atascos de magnitudes históricas en todo el centro urbano. El establecimiento de líneas de intercambiadores para intentar solucionar el problema de los barrios aislados por la modificación de las líneas ha resultado en un derroche de recursos y un foco de rechazo de todos los usuarios. La compra de varios autobuses biarticulados para funcionar en una nueva “línea central” ha sido un fracaso pues estos apenas llevan pasajeros en sus recorridos. Y no nos olvidemos de la ingente cantidad de dinero gastado en publicidad para anunciar estas “revolucionarias medidas” para convertir a Santander en una ciudad del futuro.

¿Cuánto ha costado realmente para la clase obrera de Santander está auténtica chapuza? Con un presupuesto inicial de 1,2 millones de euros, ahora el ayuntamiento dice que “solo” ha costado 2,3 millones mientras que otros medios barajan un gasto de entre 3,2-3,8 millones (representando un sobrecoste de 2 millones o más). Recientemente, la alcaldesa Gema Igual (conocida por ser la heredera del déspota Iñigo de la Serna en el puesto y de falsear su currículum) ha querido exculparse alegando que el proyecto fue un error.

¿Qué empresa o empresas han sido las beneficiarias de estos sobredimensionados costes? ¿Acaso busca el ayuntamiento pauperizar el servicio de la red urbana de transporte para privatizarlo (técnica muy habitual en la privatización de hospitales y de los servicios municipales de agua)? Esta información, de la que como siempre los medios callan, oculta a la mano corruptora formada por varios burgueses que buscan saquear las arcas públicas pagadas por el pueblo santanderino. Y mientras tanto, el ayuntamiento anuncia que se proseguirá con el proyecto con nuevas modificaciones en verano, a costa del bolsillo de los trabajadores.

La única solución para tener un transporte público de calidad para la clase trabajadora de Santander, como para la del resto del estado, pasa por socializar las empresas de transportes, así como los medios de producción, y ponerlos en manos de los trabajadores.

Por un transporte público de calidad para los trabajadores

Por la socialización de las empresas

Comité Local del Partido Comunista Obrero Español de Santander




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